TDAH en adultos: El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un trastorno del neurodesarrollo. Los síntomas más característicos son: inatención, hiperactividad e impulsividad. En este artículo vamos a abordar el TDAH en adultos.
Aunque frecuentemente el TDAH sea diagnosticado en la infancia y adolescencia, también puede persistir esta sintomatología en edad adulta.
¿Cuál es la sintomatología que podemos encontrar en la adultez?
Dentro de la sintomatología del TDAH, se observa que en la etapa adulta la inatención es el síntoma que más se mantiene, que se traduce en dificultades para concentrarse y mantener el foco atencional en una tarea determinada y, por tanto, pueda interferir en su desempeño académico, laboral, ocio, entre otras.
Por otro lado, a pesar de que la hiperactividad pueda disminuir en esta etapa evolutiva, si podemos hallar que siga persistiendo la sensación de inquietud o alteración interna. Asimismo, pueden presentar conductas impulsivas como, por ejemplo, realizar determinadas actividades sin prever las consecuencias negativas.

Conchi Moreno Rodríguez, neuropsicóloga del Centro Neurológico Antonio Alayón.
¿Cuáles son las consecuencias y/o el impacto que tiene en su vida?
Las quejas más frecuentes que podemos encontrar cuando un adulto viene a consulta son las dificultades que tienen para relajarse y concentrarse; planificar y organizar las obligaciones laborales y actividades domésticas llegando a producir problemas personales en ambos ámbitos; suelen perder objetos; necesidad de ayudas externas (alarmas del móvil, agenda, calendario, etc.) para recordar citas médicas, pagar facturas, entre otras; se distraen con cualquier estímulo y no saben gestionar el tiempo lo que les ocasiona un elevado grado de ansiedad para poder llevar a cabo las actividades que tenían previstas (por ejemplo, entregar un proyecto en su trabajo dentro del plazo acordado).
Además, podemos hallar problemas de autoestima y una mayor tendencia al consumo de alcohol y/o drogas
¿Cuáles son las líneas de tratamiento que hay que seguir?
Además del tratamiento farmacológico, cabe destacar dentro del campo de la psicología y la neuropsicología: la terapia y la estimulación cognitiva. El primero se da con el objeto de mejorar las consecuencias emocionales derivadas del TDAH y, el segundo, se da con la finalidad de enseñarle herramientas y estrategias que le permitan llevar a cabo las tareas de su vida cotidiana en cualquier ámbito.
Aunque los síntomas en la adultez son más sutiles en comparación con la infancia, el TDAH afecta significativamente en la vida de la persona. Sin embargo, el diagnóstico y la intervención individualizada de cada caso podría ayudarles a tener un manejo adecuado de sus síntomas y, por tanto, a incrementar su bienestar personal
En nuestro centro llevamos a cabo tanto el diagnóstico del TDAH, como su tratamiento.
La valoración neuropsicológica es la prueba a realizar ante un posible TDAH.
Centro Neurológico Antonio Alayón, Santa Cruz de Tenerife.
Neuropsicología.